Microsoft lanzó un órdago al Apple iPad con el lanzamiento de Microsoft Surface, un movimiento que no tendrá gran trascendencia en el mercado de tablets, al menos este año.

Para ABI Research, el escaso impacto de Windows en el mercado de tablets
radica en la lenta adopción de Windows 7, pero, sobre todo, en la
demora en el lanzamiento de los sistemas Windows RT y Windows 8, que se
espera estén comercialmente disponibles en determinados dispositivos a
partir de octubre de 2012.
Microsoft ha impulsado una estrategia de tablets
de dos vías. Por un lado, con el lanzamiento de un tablet ARM basado en
Windows RT y equipado con un procesador Nvidia, y el otro con un
tablet Windows 8 Pro basado en la arquitectura x86 de Intel.
Cada uno
ofrece características y funcionalidades distintas y estará disponible
con diferentes precios, por lo que será de interés para un tipo de
público diferente, pero, por lo que parece, no será suficiente para
competir con el iPad.
Respecto a Microsoft Surface, para ABI Research, la
oportunidad de mercado para este tablet está en los usuarios
empresariales que posean una base instalada de PC con Windows
y busquen que sus empleados tengan acceso a múltiples dispositivos,
aunque, de momento, las empresas se han opuesto a la compra de
dispositivos de computación adicionales para los usuarios debido a los
costes de soporte.
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